El furtivo AA1 fue la respuesta temprana de North Performance al sistema tradicional de aviación tripulada, armado con dos autocarabinas de calibre 30 para un combate antiaéreo veloz. Esta unidad se especializa en hostigar a las unidades de aire enemigas aprovechando una movilidad adecuada, lo que la convierte en una opción económica y segura para el control ligero del espacio aéreo.

El furtivo AA1, un modelo tan antiguo que originalmente estaba diseñado para llevar a un piloto, no era más que una plataforma móvil de armas. Su adaptación refleja, por un lado, una evolución fundamental en las defensas antiaéreas terrestres y, por otro, el compromiso de North Performance con un diseño y construcción minimalistas.